El alto coste que están alcanzando el gas natural y la electricidad, así como la gran contaminación que asola nuestro país ha hecho que se busquen nuevas fuentes de energía económicas y sostenibles. Entre ellas, en nuestro país destaca la energía solar, seguramente por las más de ocho horas de sol que tenemos.

Si bien es cierto que los sistemas de energía solar siguen siendo algo con un alto coste, mucha gente ha dado el paso para instalar paneles solares en su vivienda para, aunque no se alcance el autoconsumo, reducir el consumo de la red eléctrica y poder ahorrar. En este artículo vamos a hablar de los paneles solares, la parte fundamental de cualquier instalación de energía solar.

Tipos de paneles solares

Mucha gente cree que los paneles solares son sólo de un tipo, aunque nada más lejos de la realidad. Una de las principales diferencias es el tipo de energía solar que usa el panel solar. A día de hoy, de manera general, existen 3 tipos de paneles solares:

  • Paneles solares fotovoltaicos
  • Paneles solares térmicos
  • Paneles solares híbridos (fotovoltaico + térmico)

Panel solar fotovoltaico

Gracias a este tipo de paneles podemos transformar la radiación solar en electricidad. Por ello, gracias a este tipo de paneles sí podríamos llegar al autoconsumo.

Con cada vez unos precios más reducidos, los módulos fotovoltaicos se presentan como la mejor alternativa para conseguir electricidad de manera limpia y sostenible. Si bien siguen teniendo un alto coste, lo cierto es que su precio se ha reducido en más de un 80%.

Generalmente suelen estar  compuestos por unas células fotovoltaicas de silicio las cuales, mediante un proceso denominado efecto fotoeléctrico, permiten transformar la energía lumínica en energía eléctrica. De manera fácil, este proceso se da cuando los fotones impactan con el panel solar, de manera concreta, contra el silicio que los componen. Al impactar, los fotones bombardean a los átomos de silicio, rompiendo los electrones y liberando algunos de ellos que serán los que generen la electricidad.

Dentro de los paneles solares fotovoltaicos también existen diferentes tipos, según cómo estén compuestas las células fotovoltaicas:

  • Monocristalinos (silicio)
  • Policristalinos (silicio)
  • Otros no están compuestos por silicio como Thin Film o los orgánicos.

Panel solar térmico

En este caso se aprovecha la energía solar térmica y se denominan también colector solar. Este panel permite la transformación de la energía procedente del sol en energía térmica, es decir, en calor.

Con independencia de que se usen a nivel doméstico o a nivel industrial, los paneles térmicos presentan diferentes usos, todos relacionados con el uso de agua caliente. Sin embargo, a nivel doméstico, no pueden generar electricidad, por lo que no permiten el autoconsumo y sólo sirven de sistemas de apoyo.

Dentro de este tipo de paneles solares o colectores, también se encuentran diferentes tipos:

  • Colector de baja temperatura o captador solar plano no protegido: Los cuales alcanzan un máximo de 50ºC, este tipo de paneles se usan sobre todo para la calefacción y para el ACS a nivel de vivienda.
  • Colector de media temperatura: Son prácticamente iguales que los anteriores pero incorporan una cubierta transparente que evita la pérdida de calor del panel, lo que les permite alcanzar los 90 grados.
  • Colector de alta temperatura: En este tipo se añade otra cubierta más entre la anterior y el convertidor (un elemento clave en el panel térmico) por lo que se consigue un vacío entre las dos cubiertas, consiguiendo que la temperatura pueda alcanzar hasta 150ºC.  Este tipo se usa a nivel industrial para producir vapor el cual mueve unas turbinas que generan electricidad.

Si bien esta es la diferencia más importante, según los componentes que forman el panel térmico se pueden realizar nuevas diferencias en los paneles solares térmicos.

Panel solar híbrido

Puede ser algo lógico, pero son una mezcla de los dos tipos anteriores. Gracias a esta fusión de ambas tecnologías se puede conseguir electricidad y calor de manera simultánea.

Es un tipo que aún es muy desconocido en el mundo de las instalaciones de energía solar, pero gracias a su desarrollo aúna las ventajas de ambos tipos de paneles solares.

La principal ventaja de este tipo de paneles es la reducción del espacio necesario para aprovechar la energía solar. Por esta razón son la mejor elección si no disponemos de mucho espacio pero queremos aprovechar ambos tipos de energía solar.