Uno de los problemas más habituales en nuestras casas suele ser el mal olor de las cañerías. Normalmente no suele ser por no limpiar el baño o la cocina, si no que se suele producir con el uso y el tiempo, por la acumulación de restos de comida, detergentes o la propia humedad de los conductos y desagües. A parte de los malos olores que se producen, estas situaciones son perfectas para la propagación de bacterias y microorganismos que van en contra de nuestra salud.
Hay ciertos remedios caseros simples con los que puedes hacer la prueba y atajar estas incomodidades.
Os pasamos un truco casero para terminar con estos malos olores
Pon a calentar 200ml de vinagre blanco y otros tantos de agua, mientras rompen a hervir, vierte por tu fregadero, lavabo, ducha o bañera 5 cucharadas de bicarbonato sódico y asegúrate que entra todo en la cañería.
Una vez estén hirviendo estos líquidos, vértelos con cuidado en la cañería y pon el tapón. Deja actuar la mezcla durante una hora aproximadamente y en ese espacio de tiempo no utilices esa cañería. Si puede ser toda la noche, mejor.
Verás al día siguiente cómo han desaparecido esos olores y el agua corre mejor por tus cañerías.