En determinados momentos del día podemos sentir energía o sueño, vigor o fatiga. Los ciclos circadianos marcan nuestras fases de energía a lo largo del día. Conozca qué son y su influencia en nuestro organismo.

Iluminación LED y ritmos circadianos son conceptos estrechamente ligados. El nexo que los une es su capacidad de contribuir al bienestar y calidad de vida, en tanto que la luz influye en la calidad del sueño. Respetar los ritmos circadianos da como resultado mejoras en el descanso, la alimentación y el estado de ánimo. Gracias a los avances tecnológicos, la iluminación LED puede adaptarse a estos ciclos.

Qué son los ritmos circadianos

Los seres humanos vivimos en torno a los ciclos de luz. Nuestros niveles de actividad, deseo de dormir y ganas de comer se ven condicionados por ellos. Dicho esto, ¿qué son los ritmos circadianos y qué tienen que ver con la luz?

Son ciclos de 24 horas que forman parte del reloj interno del cuerpo. Gracias a ellos, nuestro cuerpo lleva a cabo funciones y procesos esenciales. Uno de los más importantes y nombrados es el ciclo sueño-vigilia.

La explicación a todo esto es sencilla. Las células de nuestro cerebro responden a la luz y la oscuridad. Nuestros ojos captan los cambios en el entorno y envían señales al cerebro. Allí se activan funciones que nos hacen sentir o bien cansados, o bien despiertos y alerta.

Hormonas como la melatonina y el cortisol pueden aumentar o disminuir dependiendo de nuestro ritmo circadiano. La melatonina nos da sueño. Por eso, no resulta extraño que nuestro cuerpo la libere en grandes cantidades durante la noche y la suprima durante el día. El cortisol puede hacer que estemos alerta. En esta línea, el organismo produce más por la mañana. Por lo tanto, los ritmos circadianos y la melatonina influyen en la calidad de nuestro sueño y descanso.

Iluminación LED y ritmos circadianos

Recientemente, la tecnología LED ha dado pasos de gigante para optimizar los sistemas de iluminación. Además de hacerlos más eficientes desde el punto de vista energético, ha conseguido que ofrezcan características similares a las de la luz del sol.

Podemos llamarlos sistemas de iluminación biológica, centrados en la persona o circadianos. En realidad, todos significan lo mismo. Es decir, consiguen efectos físicos y fisiológicos en nuestro cuerpo similares a los de la luz solar.

En la actualidad, existen luminarias LED que regulan nuestros ritmos biológicos. Tienen la capacidad de irradiar luces muy parecidas a la natural. Además, pueden configurarse para transmitir cambios de temperatura e iluminación a lo largo del día.

No todas las LED son iguales. Sin embargo, si se combinan con una planificación e instalación adecuadas, pueden brindar una iluminación muy beneficiosa.

Cada instalación, ya sea una oficina, un comercio o cualquier otra, requiere diferentes montajes y productos LED. Está claro que los sistemas de iluminación deben fomentar el bienestar, pero también la claridad, la precisión, la ausencia de deslumbramientos y el confort visual. Por eso, las luces LED cálidas deben instalarse solo donde realmente se necesitan. Tienen que beneficiar al organismo y, al mismo tiempo, no comprometer la seguridad ni la comodidad.

Cómo conseguir una iluminación natural

Crear ambientes iluminados de forma artificial, pero con las características de la luz natural resulta cada vez más viable. Esto es así gracias a las nuevas tecnologías inteligentes, los controladores y reguladores de luz, los diseñadores y los programadores.

En la iluminación residencial, por ejemplo, integrar estos avances puede permitir a los diseñadores imitar los cambios de luz natural. Se pueden cambiar los niveles de cian, temperatura de color e intensidad en toda la vivienda. Eso se consigue, además, automáticamente, sin necesidad de intervención humana. Así, las instalaciones se pueden programar para promover la salud, el bienestar y la comodidad.

En otros lugares, como centros hospitalarios o fábricas, se pueden planificar instalaciones con esos mismos criterios. Por ejemplo, los sistemas LED se han utilizado en unidades de cuidados intensivos neonatales para promover el crecimiento y desarrollo de bebés. Hay una cantidad creciente de datos que avalan los efectos positivos que la iluminación circadiana puede tener en estos y otros entornos. Incluso se cree que ayudan a reducir la duración de la hospitalización de los enfermos.

Iluminación LED y eficiencia energética

Las luminarias LED son, de lejos, las más eficientes de nuestro tiempo. Gracias a ellas, se obtienen porcentajes de ahorro en el consumo cercanos al 90 % con respecto a sistemas convencionales. Además, requieren una menor inversión, porque tienen una gran durabilidad, lo que a su vez reduce la huella de carbono y los residuos.

Utilizan hasta un 75 % menos de energía que las convencionales. No tienen filamentos ni materiales que deban quemarse para producir luz. Alrededor del 95 % de la energía consumida se emite en forma de luz. Mientras, solo el 5 % se pierde en forma de calor. Son tremendamente eficientes energéticamente porque el desperdicio de energía es mínimo.

Con toda esta información en la mano, resulta claro que iluminación LED y ritmos circadianos forman un binomio beneficioso para el bienestar y la salud. Gracias a la citada tecnología, no solo se puede facilitar la visión, sino también mejorar la productividad, el estado de ánimo y la calidad del descanso. Si necesita información sobre sistemas de iluminación, le invitamos a ponerse en contacto con nosotros.

Fuente: Gewiss

www.inhogar.net